Antoni M. Alcover: Claustre de Sant Vicenç Ferrer, Manacor
Manacor

Evocamos en el Claustro de San Vicente Ferrer, el discurso que Antoni M. Alcover pronunció en el I Congreso Internacional de Lengua Catalana, en 1906 en Barcelona.

Sí, somos amadores de la lengua catalana; el amor a esa lengua nos inflama el corazón, y nos obliga a todo lo que hacemos. No, no es odio a nada ni a nadie lo que nos mueve, no somos una negación. Es amor nuestro móvil, somos una afirmación, no una afirmación irreflexiva, en el aire, balbuceante, sino una afirmación con toda conciencia, madura, categórica, radical, incontrastable; una afirmación de aquellas que no menguan ni ceden nunca ni retroceden ni un ápice en nada ni por nada, aunque el mundo se de la vuelta de abajo a arriba. Somos la afirmación de la existencia de nuestra lengua y de su derecho inviolable, ilegislable, imprescriptible a vivir como cualquiera de las grandes lenguas neolatinas, sus hermanas, el derecho a vivir como dios manda a las personas libres y a a las reinas, el derecho a reinar pacíficamente, sin estorbo, traba ni contraste de ninguna clase, en todo su territorio, con todos los honores y prerogativas y preeminencias que le pertenecen. Sí, la amamos a nuestra lengua con toda nuestra alma.

Discurs d'obertura del I Congrés de la Llengua Catalana, 1906

Traducido por Sebastià Vidal. Recitado por Enric Garcia.

 

 

Antoni M. Alcover

(Manacor, 1862-Palma, 1932). Antoni M. Alcover nació en febrero de 1862, en el caserío de Santa Cirga, en Manacor. A los 15 años ingresó en el Seminario Diocesano de Palma para cursar estudios eclesiásticos. Desde entonces empezó a relacionarse con los principales intelectuales de la época, como Tomás Forteza, Marià Aguiló, Miquel Costa i Llobera, Joan Alcover... En 1896 publicó el primer volumen de su Aplec de rondaies mallorquines d'en Jordi des Racó, recopilación de cuentos populares mallorquines que alcanzó los 24 volúmenes. Viajó por Europa para formarse en filología, con el objetivo de llevar a cabo un gran inventario léxico de la lengua catalana. Implicó a miles de colaboradores en la Obra del Diccionario, que le permitieron llevar a cabo la edición del Diccionari Català-Valencià-Balear, una obra única en Europa, que abraza la lengua al completo, incluyendo la dialectal y la literaria, la antigua y la moderna. A partir de 1901 publicó el Bolletí del Diccionari de la Llengua Catalana, la primera revista lingüística de España. En 1911 fue nombrado primer presidente de la Sección Filológica del Institut d'Estudis Catalans.

Antoni M. Alcover pronunció el discurso presidencial de apertura del I Congrés Internacional de la Llengua Catalana, celebrado en Barcelona en 1906 con un gran éxito: más de tres mil congresistas, con la participación de los mejores romanistas europeos del momento. A raíz del I Congrés, en 1907 se creó el Institut d'Estudis Catalans y en 1913 la Sección Filológica publicó las Normes ortogràfiques.

 

Claustro de san Vicente Ferrer

Tan sólo se conservan dos claustros en Mallorca pertenecientes al orden de los dominicos o “predicadores”: el de Inca y el de Manacor. El convento fue fundado a finales del XVI, y su construcción se inició a principios del XVII. La iglesia es de una sola nave, con capillas laterales. Cabe destacar la capilla del Roser, plenamente barroca, con su retablo central dedicado a la Virgen del Rosario y las pinturas de la procesión en acción gracias a la victoria de Lepanto, del felanitxer Miquel Banús. El claustro del convento es una pieza muy notable del patrimonio artístico de Manacor. Consta de doble galería porticada, articulada a partir de arcos rebajados, que se apoyan sobre pilares octogonales, con bella ornamentación. La galería inferior está cubierta con cúpula, mientras que la superior muestra vigas de madera. Aún conserva su pavimento empedrado.

Con la desamortización de 1835, el claustro pasó a manos del Estado, y tuvo varios usos: desde oficina de telégrafos a sede de exposiciones agrícolas. En 1936 alojó a muchos presos republicanos de la comarca, en unas condiciones deplorables. Actualmente es la sede de la biblioteca municipal y otras dependencias del Ayuntamiento.

Los usuarios opinan

Este lugar aún no tiene ningun comentario.