Pare Francesc Garau: El Terreno
Palma

El padre jesuita Francisco Garau con su libro La Fee Triunfante, tuvo una gran importancia en la perpetuación de la cuestión chueta. En el fragmento seleccionado explica porqué se eligió este lugar de El Terreno.

Mandó levantar un brasero de ochenta pies en cuadro y ocho en alto, y disponer en él, a buena proporción veinte y cinco palos con sus tablas para asiento de los que habían de morir a garrote, y prevenir leña necesaria para tan gran hoguera. Eligió para esto un campo yermo, que se encancha espacioso entre Lazareto, está sobre la orilla del Mar y las faldas del collado que llaman del Castillo de Bellver; asi por la capacidad del puesto, como por la distancia de la ciudad, para que no se sintiera la pesadumbre del humo. Aunque otros glosaban había sido oculta Providencia Divina, que suavemente disponía para su desengaño a los Reos, que murieran casi en el propio lugar que habían escogido para el embarco en la fuga; y supieran los venideros, o los que queden, que sabe Dios hacer braseros en que arda, donde buscó la perfidia su escape en que navegara para obstinarse proterva.

La Fee Triunfante en quatro autos celebrados en mallorca por el Santo oficio de la Inquisición en que an salido ochenta, i ocho reos, i de treinta, i siete relaiados solo uno tres pertinaces. Expressada por el R. P. Francisco Garau de la Compañía de Iesus, Calificador del Santo Oficio, Examinador Sinodal de esta Obispado, Excatedratico de Prima Teologia en el Colegio de Barcelona, i el Retor del Colegio de Montesion de la misma Compañia. 1691


 

Padre Francesc Garau

(Girona, 1640 – Barcelona, 1701). Jesuita, teólogo y escritor. Catedrático de Teología del colegio jesuita de Barcelona y rector también los colegios de Urgell, Mallorca y Zaragoza. Colaboró con la "Inquisición" y fue Censor y Calificador del Santo Oficio.

Su producción literaria gozó de cierto prestigio en la época, razón por la cual se le encomendó un libro sobre los actos de fe que tuvieron lugar en Mallorca, en 1691, en los que 37 “xuetas” fueron ajusticiados y de los que había participado como calificador del Santo Oficio.

Este libro, La Fee Triunfante, tuvo una gran importancia en la perpetuación de la cuestión “xueta” y algunos autores le atribuyen la responsabilidad exclusiva. Curiosamente de La Fee Triunfante se llegaron a hacer hasta cuatro ediciones: en 1691, y las otras en 1755, 1931 y 1984. Baltasar Porcel en su libro Los Xuetes (1969) escribe: "Actos de fe de 1961: De estos eventos, queda uno de los libros más impresionantes de nuestro mundo cultural: La Fe Triunfante en Quatro Autos, compuesta de ciento veintitrés páginas. Y el canónigo Tarongí, el gran apóstol de los “xuetas”, dejó su juicio contundente en su encendido y punzante libro Algo sobre el estado religioso y social de la Isla de Mallorca, publicado en 1877: "hace doscientos años que el libro La Fe Triunfante ha sido la causa principal de las preocupaciones de unos mallorquines contra los otros."

El texto narra los cuatro actos de fe de los días 7 de marzo, 1 de mayo, 6 de mayo y 2 de julio de 1691 donde estuvieron encausados 88 reos por su empeño en el credo del judaísmo.

Escogemos un extracto que da noticia de la elección del lugar en el Terreno y de la tendenciosidad de la narración, concebida como una herramienta propagandística destinada a mostrar el castigo de los rebeldes y la ejemplaridad en los casos de redención sacramental de otros reos.

 

El Terreno

El barrio de El Terreno se sitúa en un territorio que en la Edad Media pertenecía al castillo de Bellver. Actualmente se sitúa en el extremo inferior del castillo conviviendo con las construcciones que progresivamente han ido cambiando su morfología inicial. En el siglo XVIII aparece ya en la zona la finca del Terreno, de donde toma el nombre el barrio, como propiedad del cardenal Despuig. La adquisición de fincas y la parcelación de terrenos hicieron que comenzara el proceso de urbanización que, junto con la construcción de caminos nuevos, consolidaron el núcleo que progresivamente se estableció desde mediados del siglo XIX.

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